Uno de los avances importantes que el ser humano ha realizado
en los últimos años ha sido la tecnología de la información (TI), la cual nos
permite estar informados y comunicados en tiempo real, de hecho esta revolución
informática ha contribuido al proceso de globalización: uniendo los mercados,
sociedades y culturas del mundo.
Soy de la generación X (nacida al inicio de los años 80) que
crecimos sin tecnología informática, por lo tanto para compartir una foto
teníamos que llevar el álbum físico a mostrárselo a quien deseábamos, a finales
de la década de los 90 en Colombia ya podíamos acceder a correos electrónicos
para comunicarnos, sin embargo aún no existían las cámaras fotográficas
digitales como para compartir por este medio fotografías. Para mediados del año
2000 comenzaron a masificarse las redes sociales y para ese momento ya existían
las fotos digitales, así la difusión empezó a ser más expansiva de estas.
Las generaciones siguientes: la Y (Millennials) y la Z, nacieron
inmersos en medio de los avances tecnológicos, crecieron con Facebook y
tomándose selfies constantemente. Hoy deseo tocar este tema porque me llamó
mucho la atención un artículo que leí, el cual mencionaba que “el auge de las
redes sociales ha potenciado el narcisismo durante el último decenio, en el
mundo aumentó en un 30% el número de narcisistas[1]”,
la palabra narcisismo no se ha difundido masivamente, puedes estarte
preguntando qué es eso?, el narcisismo está relacionado con el mito de Narciso,
es decir, amor a la imagen de sí mismo[2],
generalmente el narcisismo es una conducta potenciada por la inseguridad y este
trastorno de personalidad se caracteriza por un fuerte sentido de egocentrismo
y una preocupación excesiva por sí mismo.
Eso significa que no puedo subir una foto a mi red
social?, claro que si!!!, no se trata de generalizar, el problema comienza
cuando un persona desea exponer excesivamente su vida personal (A través de
fotos, de actualizar cada 5 minutos su estado, indicando cómo se siente, que
está haciendo, todo girando alrededor de su vida), puesto que esto podría mostrar
que es alguien con baja autoestima, que busca aprobación y aceptación de los
demás.
La siguiente pregunta que surge es: Qué tipo de fotos suelen
subir las personas?: las fotos donde aparecen más atractivas, las que muestran
sus logros, lugares visitados, viajes realizados…Somos selectivos con las fotos
que subimos, pues es nuestra imagen la que se encuentra expuesta a muchas
personas. El problema es cuando empiezas a sentirte incomodo o mal porque
subieron una foto tuya en la cual a tu criterio no te ves bien o más bien te ves cómo eres en tu día a día
(sin previo arreglo para una cita, para un día especial).
Lo otro a tener presente es cuando las personas se mantienen
pendientes de cuántos “like (Me gusta)” ó “Follow” alcanza una foto publicada,
o sea, inconscientemente estar en función de la “aprobación” de otras personas.
Los Likes no pueden determinar tu estado anímico!!!.
Facebook y Twitter son las redes sociales que más han
promovido la tendencia de las selfie, existen Sociólogos y Psiquiatras que
consideran que esto es un acto de vanidad, que muestra una tendencia narcisista
o falta de autoestima…Entonces ahí es cuando quien suele realizar esto con
cierta frecuencia, debe examinarse internamente que es lo que lo motiva para
estar constantemente tomándose selfies?, en el fondo lo que necesita es
autoafirmación? O reafirmar su identidad?
En la Biblia en
Salmo 139:23 dice: Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y
conoce los pensamientos que me inquietan. Y el Versículo 24a Señálame
cualquier cosa en mí que te ofenda. Pienso que una buena práctica diaria es
pedirle a Dios que examine nuestro corazón, que sea El revelándote si a través
de nuestras conductas en redes sociales lo que estamos evidenciando es la
inseguridad que existe en nuestro interior y si llegas a identificarte con
esto, no sientas pena, vergüenza o temor, porque en Dios puedes lograr la
seguridad que estás buscando, porque tienes un Padre Celestial que puede suplir
con Su amor, las carencias que tuviste y que te han llevado a buscar aprobación
en otros.