Ebenezer significa “piedra de
ayuda”, fue un monumento de piedra erigido por el profeta
Samuel entre Mizpa y Sen, en la región donde el Señor dio a Israel una gran
victoria sobre los filisteos bajo la conducción de Samuel[1]. Este monumento de piedra
era un memorial de la ayuda recibida de parte de Dios, sirviendo como
testimonio para aquella generación y las próximas generaciones de la bondad de
Dios.
Veamos la cita Bíblica de esto en 1 Samuel 7:12 nos dice: Tomó luego Samuel una piedra y la puso entre Mizpa y Sen, y le puso por nombre Ebenezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová.
Nuestra fe debe construirse
sobre la fe, es decir, un testimonio del pasado que tienes de lo que Dios ha
hecho en tu vida, hace que cuando estés atravesando momentos difíciles lo
recuerdes y puedas cimentar la fe que necesitas en el presente sobre la fe que
tuviste antes. A veces, es necesario ir a ver de nuevo nuestros EBENEZER,
puesto que esos eventos se mantienen como testigos de lo que Dios hizo en nuestra
vida, cuales son tus EBENEZER?
·
Dios sanó a un familiar.
·
Dios te dio la provisión que
necesitabas.
·
Dios te salvó en un accidente
automovilístico.
·
Pasaste el examen para poder
ingresar a estudiar.
·
Lograste el trabajo que
anhelabas.
·
Dios restauró tu matrimonio.
·
Dios te sanó de tus heridas.
Todo esto fue posible porque
tuviste en el pasado confianza en el Dios todo poderoso y ese mismo Dios que te
ayudo antes, ha de mostrar nuevamente Su amor y misericordia en tu vida. Dios
es especialista en convertir valles de aflicción en una puerta de esperanza, a
El eso no le queda grande, sólo quiere que le creamos que si lo puede hacer.
Cuando se acaban todos nuestro
kit de herramientas para solucionar los problemas, cuando ya no tenemos más de
donde aferrarnos, ahí es que Dios tiene la libertad de obrar libremente y
mostrar Su poder, y es ahí que construyes un nuevo EBENEZER.
Quizás venga a tu vida personas
que te digan que no va a ser posible, que veas la situación demasiado oscura y
sin posibilidades de vencer, pero debes recordar que Dios lo hizo una vez y que
lo va a volver a realizar en tu vida. No tengas miedo porque Dios camina contigo, El te respalda
y no te dejará avergonzado. Y esto que estás viviendo no es el final de
tu historia, esto es solo un EBENEZER más qué estás levantando y que podrás más
adelante recordar.
Personalmente, cuando me siento
triste y siento que estoy enfrentando un gigante lo que suelo realizar es
colocar alabanzas que traen a mi mente mis historias con Dios, donde recuerdo
lo que Dios ha hecho en mi vida, donde he visto Su poder. Y puede que en la
primera canción no me levante de una, pero sigo escuchando esas alabanzas hasta
que siento que nuevamente mis fuerzas se levantan y vuelvo a tener fe. Recuerdo
que una amiga me contó alguna vez que la forma de construir sus EBENEZER era
escribiendo en un cuaderno las bendiciones que Dios le daba y que cuando estaba
en momentos de adversidad ella miraba esos apuntes. Tal vez tu forma no sea
escribiendo o escuchado alabanzas, piensa de que manera harías tu, tus EBENEZER?.
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